Cacería en Andalucía
Lejos de ser un hecho aislado o una afición que solo interesa a unos pocos, la cacería en Andalucía es una de las actividades tanto económicas como sociales más importantes de la comunidad. Por extensión, características geográficas y climatología, Andalucía es un auténtico paraíso para todos los aficionados que disfrutan tanto con la caza mayor como con la caza menor.
La cacería en Andalucía dinamiza las provincias y los pueblos en los que se ubican los diferentes cotos de caza en los que tienen lugar las cacerías. Además promueve un estilo de vida sostenible con la naturaleza y en paz con el medio ambiente debido a que solo se cazan aquellos ejemplares que son necesarios para el correcto mantenimiento del ecosistema natural.
Gracias a la cacería en Andalucía diferentes pueblos, aldeas y pedanías han esquivado el eterno olvido de quedar recluidos en mitad de una sierra o de la montaña. Sin lugar a dudas, la caza es una actividad que genera importantes beneficios. La información es clara al respecto. Según datos obtenidos de la Junta de Andalucía, la actividad cinegética genera cada año un impacto económico valorado en 71,65 millones de euros, además de 47.700 jornales.
Otro apunte a considerar: en Andalucía hay más de 7500 cotos de caza repartidos entre las 8 provincias, además de 575 cotos deportivos gestionados por diversas sociedades de aficionados, colectivos y clubes particulares encargados de poner a disposición de los socios participantes en estas entidades la posibilidad de disfrutar de la caza mayor y la caza menor en Andalucía.
Por su parte, la caza menor es el tipo de caza más común en prácticamente toda la comunidad autónoma. La principal diferencia en comparación a la caza mayor es el tipo de especies que se capturan. En el caso de la caza menor, el conejo, la codorniz, la paloma, la liebre y la perdiz roja son los protagonistas durante las cacerías en Andalucía, mientras que en el caso de caza mayor hablamos de otro tipo de especies animales como son jabalíes, corzos, ciervos, venados o cabras montesas, es decir, animales más grandes que un zorro.
Un aspecto clave respecto a las monterías y cacerías en Andalucía es la organización. Normalmente se establecen dos grupos de cazadores. El primero está situado en diferentes puestos de caza, mientras que el segundo grupo se encarga (ayudado de perros de caza) de levantar y hacer huir las presas hacia los puestos de caza. De esta forma, los cazadores pueden atrapar las piezas con mayor facilidad.
Como ves, las cacerías en Andalucía forman parte no solo de la cultura autonómica sino que suponen una inyección económica para todo el territorio. Si quieres disfrutar de esta actividad y estar al día de todo lo que sucede en las diferentes provincias y cotos de caza, no dejes de consultar Monteiberia, el primer portal especializado en experiencias rurales. ¡Te esperamos!
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